Los virus informáticos, a través de los virus de arranque, se infiltraron por primera vez en las computadoras, allá por el año 1986. En aquellos tiempos sólo despertaban curiosidad. Las rutinas adicionales al comportamiento de virus eran relativamente inofensivas. Por ejemplo, algunas de estas rutinas mostraban caracteres especiales que se desplazaban por la pantalla, reiniciaban el sistema, imprimían mensajes especiales, etc. Por supuesto que a medida que estos virus ganaban popularidad, las compañías comenzaron a notar como afectaba la productividad de sus sistemas. Este tipo de virus se reproducía exclusivamente mediante el tráfico de diskettes infectados, por lo que su proceso de propagación era efectivo pero lento. Algunos de estos virus, como el Michelangelo, Stoned, etc han provocado importantes incidentes de virus a fines de la década del ´80 y encontraron su máximo nivel de infección a principios de la década del ´90. Por supuesto que algunos de estos virus, junto con el conocido virus argentino Diablo, todavía están causando infecciones.
La utilización de redes para compartir información entre computadoras junto con otros aspectos, provocaron el surgimiento de un nuevo tipo de virus, los virus de archivo ejecutable. Estos virus tienen la particularidad de poder replicarse de archivo en archivo, luego de la ejecución de alguno infectado. Estos virus alcanzaron notoriedad a comienzos de la década del 90 y rápidamente se perfeccionaron incluyendo técnicas especiales de programación que los tornaron aún más difíciles de erradicar. Virus multipartitos o mixtos que infectan tanto archivos ejecutables como sectores de arranque surgieron para complicar la situación. Dentro de este tipo de virus podemos citar a virus como el Predator y Natas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario